¡Sí pues!
Yo soy de ahí donde
existen menos de diez semáforos,
donde mirar por el retrovisor
es ver una calle en silencio /de noche/.
Soy también de allá
donde los domingos
son sagradamente familiares
y donde
la bulla del tráfico es solo
el veinticuatro a las nueve.
Yo soy de ahí donde
existen menos de diez semáforos,
donde mirar por el retrovisor
es ver una calle en silencio /de noche/.
Soy también de allá
donde los domingos
son sagradamente familiares
y donde
la bulla del tráfico es solo
el veinticuatro a las nueve.